Siempre lo he dicho, pero nadie me hace caso. En este caso no me hace caso la diosa fortuna, porque yo pongo mucho de mi parte. Y es que si yo fuera rico que nadie dude de que al medio ambiente le iba a ir mejor. ¿Cómo? Pues aquí estoy para contarlo. Y es que si yo algún día pudiera tener la suerte de recibir un par de millones de euros de los Euromillones, no pido más. Ya os digo que al medio ambiente, y por ende, a todo las personas del mundo, les iría mejor.
Tengo que reconocer que mi mentalidad verde es desde siempre, no de esta moda política que parece que ha llegado ahora de ser progre. Ahora bien, yo siempre he sido de esos amantes de la naturaleza, nada de ecologista o esas palabras modernas de ahora que no me gustan. Desde pequeño, recuerdo que me lo pasaba pipa pasando tiempo al aire libre, sobre todo cuando iba a mi pueblo en la provincia de Zamora, explorando bosques y mirando la vida salvaje de los animales. Por eso, si yo ganó dos millones de euros tengo muy claro que una mano iba a echar a la naturaleza, algo que tanto nos ha dado y que nunca le devolvemos. Pienso que estoy en deuda y con ello, y cuando escucho eso del cambio climático (no todo lo justifica, pero sí creo en él), me siento responsable y tengo que colaborar.
Eso sí, antes de nada me daré algún capricho relacionado con el mundo de la joyería. Hablaría con Serranos Joyeros, que son artesanos de las joyas para que me recomendarán alguna joya con la que pudiera demostrar también mi mentalidad verde. Quizá un reloj o una cadena donde quedará reflejado el proyecto que estoy llevando a cabo.
Pues bien, si de repente aparecen dos millones de euros en mi cuenta. Lo primero que voy a hacer es buscar organizaciones y proyectos que estén dedicados a la conservación del medio ambiente. Por ejemplo, tengo claro que voy a apoyar la reforestación de zonas deforestadas, así como la protección de áreas naturales en peligro de desaparición. Creo que los árboles, como se estudiaba siempre en el colegio (ahora no sé qué pasará) son nuestro mejor alimento, y por eso, una ciudad llena de árboles es una ciudad de futuro.
Investigación y educación
Ahora bien, no hacemos nada si no pensamos en el futuro. Y para eso lo que hay que hacer es apoyar a la investigación y desarrollo de tecnologías verdes, las que están destinadas a la generación de energía renovable y la reducción de emisiones contaminantes. Tengo claro que el avance de la tecnología es fundamental para poder hacer frente los desafíos ambientales que vivimos en la actualidad. Por eso creo que la investigación es muy importante. Eso sí, como me pasa en todas las cosas, una investigación directa y que no se ande por las ramas de ideología, en este caso nunca mejor dicho.
Y después de la investigación viene la educación. O incluso antes. Por eso, si yo fuera rico también haría una aportación para financiar programas educativos y de conciencia ambiental. En este caso dirigidos a comunidades locales y jóvenes, todo ello con el objetivo de promover un mayor respeto y cuidado por la naturaleza. Porque tengo claro que a todos, incluso a todos los políticos, nos interesa tener un mundo mejor y una naturaleza al 100%, pero eso sí, nunca mezclado con temas políticos, que yo creo que es el gran problema que tenemos en la actualidad. Todo, y digo todo, se mezcla con política y se intenta llevar a su parcela.
Por último, otra parte del dinero me gustaría destinarlo la creación de una propia organización sin fines de lucro, con el objetivo de impulsar proyectos sostenibles en el medio rural. En especial en la zona de mi pueblo en Zamora. Estos lugares que me vieron crecer y que ahora están sufriendo el mayor de los problemas, la despoblación.
Por eso, si yo fuera rico me iba a sentir muy bien, pero sobre todo mejor el medio ambiente. A lo largo de los años, Me iba a sentir muy orgulloso de haber dedicado mi fortuna a una causa tan importante y sabiendo que, gracias a mi inversión, el planeta va a ser un lugar mejor para las generaciones futuras. Y después de esto, ¿tengo tu voto a favor para que en el próximo sorteo de los Euromillones yo sea el agraciado? La duda ofende.