Mis padres desde bien pequeño me infundieron una gran conciencia ecológica. Como todas las cosas que uno aprende cuando es un niño se quedan grabadas. He estado viviendo en el centro de Madrid muchos años, rodeado de contaminación y ruidos. Ahora que las cosas me han ido mejor, decidí marcharme de mi querida, pero contaminada Madrid, para marchar a la sierra de Madrid.
Mejor calidad de vida y tranquilidad. Nos hemos vuelto locos todos estos meses buscando casas que se ajustaran a los que buscábamos. Un chalecito donde además pudiésemos cultivar cositas. Al final encontramos una casa que se parecía bastante a lo que queríamos. Aunque por precio entraba, teníamos que realizarle una serie de mejoras.
Una de las que más interés tuvimos en realizar fue la del tejado. Un buen amigo de la familia nos recomendó Cubiertas Estevez. Echamos un vistazo a su página y nos sorprendió el detalle con el que relataban su labor.
Lo bueno del caso, es que eran especialistas en la rehabilitación y reforma de tejados viejos. Algo que nos llamó la atención fue que hablaban de que ahora, cuando se rehabilitan o reparan las cubiertas, suele tenderse a transformar los espacios bajo la misma en habitables.
Estos espacios, como en mi casa, solía ser donde estaba el trastero o desván y que ahora suelen pasar a ser habitaciones o estudios. Debido a esto, es recomendable, asegurar la habitabilidad, cuidando a la vez el aislamiento, impermeabilización, ventilación o la ligereza de los materiales que se emplean.
Reparando desperfectos
Algunos factores que me comentaron y que me parece importantes que lo sepáis si vais a proceder como hice yo a reparar un tejado o cubiertas son:
- Garantía: Se deben usar productos y sistemas garantizados, para asegurar que la rehabilitación que se realiza es definitiva.
- Ligereza: Los materiales que se usan, tienen que ser ligeros, de manera que no se sobrecargue el peso con la estructura antigua del edificio.
- Facilidad a la hora de colocarlo: Los sistemas que se utilizarán tienen que ser simples, permitiendo trabajar ágilmente y de manera segura.
- A nivel estético: Muchas de las rehabilitaciones necesitan que se mantenga una estética que pegue con el entorno y eso era algo que queríamos.
Algo que nos gustó mucho en esta empresa es que respondieron afirmativamente a la hora de nuestras consideraciones a la hora de realizar la obra desde el punto de vista ecológico. Para que los trabajos supusieran la menor molestia tanto al medio ambiente como al vecindario.
Los trabajos se terminaron de forma magnífica y gracias a Cubiertas Estevez pusimos la guinda al pastel de nuestra casa. Ahora soy yo el que hace como mis padres y en nuestro terrenillo, intento inculcar la conciencia ecológica a mis pequeños. Este es un trabajo que hay que realizar poco a poco, pero como me ocurrió a mí, al final cala en la persona y luego es más fácil que sea no ya una persona con más conciencia ecológica, también social y de comportamiento.
Muchas veces, sobre todo en las generaciones anteriores, no se le ha dado la importancia que merece la ecología, pero el daño que hemos causado al medio ambiente todos estos años ha tenido como consecuencia que realmente valoremos el acercarnos más a la naturaleza y cuidarla.
Es como si todos estos años hubiésemos pensado que era una fuente inagotable y no es así. Nuestro planeta si lo maltratamos, termina haciéndonoslo pagar y es absurdo maltratar un mundo tan bello como el que tenemos.
Mi esperanza es con las generaciones futuras, que espero que nazcan con una conciencia mayor a la que tuvimos nosotros. Soy consciente de que mi caso es casi una “rara avis”, pues mis amigos de toda la vida nunca se interesaron demasiado por el tema y si lo hicieron algo fue por el “tostón” que les di yo, pero es verdaderamente importante.
Así que ya sabéis, si tenéis un amor por nuestro planeta, no perdáis la oportunidad de comunicar vuestro amor y conciencia con vuestros hijos, familiares o amigos. Es poca cosa sí, pero si todos hiciéramos un poco, al final el resultado es mucho y podremos dar el mejor regalo que se puede dar a un hijo, un mundo más limpio y mejor donde vivir.