Tener un pequeño huerto en casa es el sueño de muchas personas. Para poder cultivar algunas hortalizas o verduras, disfrutar del proceso de crecimiento, pero también para poder degustar productos frescos y orgánicos. ¿Pero por dónde hay que empezar? Pues en este artículo vamos a explicar todo lo que necesitas para crear un huerto en casa y así poder comenzar a cultivar tus propias plantas.
- Busca un buen espacio
El primer aspecto que tienes que tener claro es el espacio en el que vas a crear el huerto. Debes tener en cuenta que la zona debe ser adecuada. No hace falta que sea un jardín, también sirve una terraza, pero en ese caso necesitarás macetas o recipientes amplios en los que poder cultivar.
Este lugar también debe contar con luz solar directa, según los expertos debe tener al menos 6 horas de sol al día. Y también debe tener fácil acceso a una toma de agua.
- Compra tierra y sustrato
Otro aspecto importante es la tierra y el sustrato. Y es que la tierra determinará el éxito (o fracaso) de tu huerto. Por ello, la tierra debe ser rica en nutrientes, estar bien drenada y libre de cualquier tipo de maleza.
Mientras que si decides cultivar en macetas tienes que usar un sustrato de calidad. Se recomienda que tenga una mezcla de turba, vermiculita y perlita.
También necesitarás abono. “El mejor abono natural es el humus de lombriz, porque regenera el terreno y alimenta los cultivos de manera natural. También nutre las plantas de forma balanceada a la vez que mejora las características físico-químicas del terreno y se puede emplear en cualquier época del año”, explican desde Vermiduero, empresa fabricante de productos ecológicos basados en el humus de lombriz.
- Escoge bien las semillas o plantas
También necesitas comprar semillas o plantas. Actualmente lo puedes hacer en un vivero o incluso desde casa en una tienda online.
Si eres un principiante, es recomendable comenzar con plantas que ya estén creciendo en macetas o recipientes. Esto te dará una ventaja inicial, ya que las plántulas necesitan menos cuidado y atención que las semillas. Además, tendrás que esperar menos tiempo a que crezcan.
También sería conveniente que aprendas un poco sobre las especies que vas a plantar en tu huerto. Debes contar con información básica como cada cuanto regar las plantas, los cuidados imprescindibles o los sustratos necesarios.
- Necesitas herramientas de jardinería básicas
Por supuesto, también necesitas herramientas de jardinería básicas para poder hacer las tareas de cuidado del huerto como plantar, cultivar o cosechar. ¿Pero qué herramientas necesitas? Pues las herramientas imprescindibles son una pala, un pequeño rastrillo, unas tijeras, unos guantes y una regadera.
Pero estos son los útiles básicos, si quieres descubrir algunas herramientas más tienes que leer este artículo de la revista Micasa.
- Ten acceso a agua cerca
Tu huerto va a necesitar agua regularmente, especialmente durante los días más calurosos del verano. Por ello, tanto si cultivas en macetas como en tierra, es importante regarlas con frecuencia para evitar que se sequen. Y es mucho mejor tener un acceso a una toma de agua cerca, para no tener que andar demasiado con la regadera de un lado a otro. Es mucho más cómodo tener una manguera para poder usar el agua necesaria para regar tus plantas de manera rápida, sin la necesidad de tener que hacer muchos viajes.
- Necesitas paciencia y dedicación
Y no hay que olvidarse de que la jardinería requiere paciencia y dedicación. Tienes que asegurarte de revisar regularmente tu huerto para detectar cualquier problema y tomar medidas para solucionarlo lo antes posible. Debes prestar atención a las necesidades específicas de cada planta, como la cantidad de agua y sol que necesitan. Todo esto lo podrás ver por el crecimiento de las plantas, el color de las hojas o el aspecto de la propia planta.
Y para todo ello, necesitarás mucha paciencia, pero también tiempo. Pero sobre todo, no te puedes olvidar de disfrutar del proceso de cultivar tus propias verduras y hortalizas.
En resumen, crear un pequeño huerto en casa requiere un poco de planificación y preparación, pero es una actividad gratificante y saludable que merece la pena el esfuerzo. Con un poco de espacio, tierra, semillas o plantas, herramientas de jardinería, agua y fertilizantes, puedes comenzar a cultivar tus propias plantas y disfrutar del sabor y el placer de degustar las verduras y hortalizas que has cultivado tú mismo.